La tarde fue para el que no estaba anunciado en el cartel. Joselito Adame vino a sustituir a Iván Fandiño, y trajo el esportón cargado de ambición, de inteligencia y de firmeza. Con tal bagaje cualquier torero suele destacar, máxime si encuentra toros que se prestan a su lucimiento, como los que trajeron los Lozanos. Una corrida que, como dicen los taurinos, "se dejó". Eso quiere decir que los bichos no han planteado serios problemas a la terna. Ninguno pude calificarse de bravo en el caballo, porque en la segunda entrada, que es la que cuenta, o han sido tardos o no se han empleado. Pero en la muleta todos han dado opciones, especialmente quinto y sexto.
Joselito Adame no perdonó un solo quite. En el cuarto por navarras
Joselito Adame se hizo presente ya en el primero de la tarde, con un buen quite por gaoneras de pies juntos y clavados en la arena, que provocó la réplica de El Cid. Al cuarto le hizo un quite por navarras algo embarullado por la falta de recorrido del burel, lo que precisamente desaconsejaba estos lances.
El segundo de la tarde salió distraído y doblando las manos. Sin emplearse en el peto anduvo remiso en el quite por chicuelinas del mejicano que fue de mando en los vuelos del capote. Muy parado en palos, Adame supo que no había otra que atacarlo, pero pecó de perfilero en los derechazos, ajustándose más en los naturales ayudados. Mejores los adornos genuflexos y los desplantes. Su mayor defecto es uno muy grave: no marca los tiempos en la suerte de matar, echando la muleta a la cara al tiempo que mete la mano del estoque. Eso hizo que la estocada honda quedase atravesada y necesitase de descabello.
El segundo de la tarde salió distraído y doblando las manos. Sin emplearse en el peto anduvo remiso en el quite por chicuelinas del mejicano que fue de mando en los vuelos del capote. Muy parado en palos, Adame supo que no había otra que atacarlo, pero pecó de perfilero en los derechazos, ajustándose más en los naturales ayudados. Mejores los adornos genuflexos y los desplantes. Su mayor defecto es uno muy grave: no marca los tiempos en la suerte de matar, echando la muleta a la cara al tiempo que mete la mano del estoque. Eso hizo que la estocada honda quedase atravesada y necesitase de descabello.
El quinto de Alcurrucén tenía por nombre "Alcaparrito" y escaso trapío. También distraído de salida y sin emplearse en el peto y en palos, demostró poca codicia en el quite por zapopinas, movidas y con rectificaciones. Con decisión, el manito inició con pases de guarbarrera para salir a los medios y enganchar tandas ligadas al burel, que empezó a romper a bueno, en las que alternaron pases ajustados y templados con otros sin apreturas y con la pierna retrasada. Con la zurda se lo pasó por la faja. Supo resolver con martinetes los parones y buenas fueron las trincheras. Tras unas manoletinas enganchadas, volvió a fallar a espadas con un feo pinchazo en los bajos, antes de cobrar una estocada delantera. El respetable soslayó tan grave fallo y pidió mayoritariamente el despojo.
En resumen, buena tarde de Adame, pero con esas zonas oscuras de fases de neotoreo y, sobre todo, de estar muy verde en la suerte suprema.
No puede decirse lo mismo de El Cid y de Juan Pablo Sánchez.
El de Salteras anduvo a la deriva en ese quiero y no puedo a que ya nos ha acostumbrado. No es que sus toros fuesen buenos, pero en otros tiempos le hubiesen servido. Con el primero, tardo pero repetidor en corto, anduvo indeciso y con demasiados enganchones. El cuarto se frenaba y salía de los pases con la cara arriba, quizás por culpa de una banderilla que Alcalareño dejó en el cuello, y El Cid no supo resolver el problema. Mató mal, pero esta vez no perdió nada por el mal uso del acero.
El de Aguascalientes anduvo vulgar con el capote toda la tarde. El tercero fue un borrego que entraba humillado, andando y sin hacer un mal gesto. Pero el sexto era un toro extraordinario por el pitón izquierdo al que Juan Pablo fue incapaz de sacar un solo natural limpio. Comete además el pecado de no adelantar la pierna contraria ni en el cite del primer pase de cada serie. Defectuoso con los aceros, bien pinchando, bien tirándose a los sótanos.
Mala tarde también de los subalternos. Por fallar, hasta anduvo poco inspirado El Boni en la brega. Se aplaudió a Pepillo Hijo, perdonándole que tapara la salida al tercero.
Cuadro de puntuación de la corrida de Alcurrucén
(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada,
al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)
Viento del oeste y tarde fresca
Juan Pablo Sánchez escoltado por Candelas
Repartiendo castoreños
José Luis Lozano, Jaime Ostos y Simón Casas, los tres de durse, en el patio del desolladero
Reflexionando en lo alto del tendido
Algo más de media entrada
"Barbero" cornea al caballo de Juan Bernal
Óscar Bernal recibe a "Bilbaíno"
El Pana, con puro y sombrero de ala ancha (Stetson), recostado en el tendido del 6
Pepillo Hijo agarra bien a "Licenciado"
Espartaco se emplea con "Valenciano"
Un "fashion" de la grada
Héctor Vicente cuida a "Alcaparrito"
El Pana, con su Stetson, se vino al 3 para aplaudir a su compatriota Adame
Antonio Saavedra señala bien a "Alcalá"
Joselito Adame se va de Madrid pisando con fuerza
2 comentarios:
Un detalle. El sombrero de El Pana era un Stetson. Saludos y en hora buena por el gran blog!
Pues anotado queda en el pie de foto. Muchas gracias y un saludo.
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