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jueves, 7 de junio de 2018

El desafío ganadero contado en imágenes. Las Ventas, 7 de junio de 2018

Tres cuartos de entrada en tarde fresca

La acorazada sobre el callejoncito de picar
  
El primero, de Rehuelga, salió derrumbándose

'Carnaval' empuja por el pecho del caballo...

 ...y Jesús Vicente da con sus huesos en el suelo

Rafael González y Raúl Mateos alejan el peligro

 El buendía aterrizó también en el quite de Javier Cortés

 Natural de Iván Vicente

 Estocada del madrileño, cobrada por derecho

Cadalseños en el 9

 El segundo de la tarde, de Pallarés, salió perdiendo las manos

 Los cabestros, cuidando de no pisar el área de picar

Segundo bis. Se corrió turno

Javier Cortés no pudo acoplarse en el saludo

Juan Francisco Peña picando a 'Avinado'

 Antonio Molina sortea la encornadura veleta

Javier Cortés hizo un doble brindis: a través del micro y al respetable

El madrileño alarga la embestida...

Cite con la zurda

La estocada quedó pescuecera

Palco presidencial

 Verónica de saludo de Javier Jiménez al tercero, de Rehuelga

Manuel Cordero encierra a 'Mulerito'

Quite de Iván Vicente

El sevillano recurrió mucho al unipase

 Tablilla del cuarto

 Saludo de Iván Vicente y buen trapío del toro

 'Turquesito', arrancándose en la tercera entrada

 Raúl Mateos supera las guadañas

 Al de Pallarés le costaba entregarse en la muleta...

 ...y acabó distraído

Fran, de la Jungla a Las Ventas

El sobrero de José Luis Marca, que hizo quinto

El jabonero 'Mulato' salió de naja

A Abraham Neiro le echó la cara arriba

Javier Cortés citaba como si el toro fuera noble...

...y estuvo a punto de pagarlo. Se libró sólo con un puntazo

El madrileño pinchó repetidamente y acabó pegando un sablazo

Los palcos de Comunidad y Ayuntamiento

El sexto pesaba 144 kilos más que el cuarto, del mismo hierro de Pallarés

 'Dichoso' desarmó a Javier Jiménez en el saludo

Agustín Romero tapó la salida en la primera entrada, con mano fuerte

El picador toreó bien a caballo, pero el buendía no se decidió,
 aunque José Chacón lo llamaba desde la cabeza 

El puyazo señalado en buen sitio

 Par de Alejandro Sobrino

El toro acabó parándose en la muleta y no dio facilidades

Más sobre la tarde en Desequilibrado desafío ganadero

Desequilibrado desafío ganadero, Las Ventas, 7 de junio de 2018

La fórmula del desafío ganadero es una hábil forma de vender dos medias corridas de toros de dos ganaderías que no pueden presentar una corrida completa. Incluso en este caso, una ganadería, Rehuelga, no ha podido presentar tres toros. Parece lógico que si el cartel se anuncia como "desafío" ganadero, como una suerte de lid entre dos hierros, no pueda presentarse desequilibrado con 4 toros de uno y sólo 2 de otro. Quizás habría sido deseable sustituir a Rehuelga por otra ganadería que presentase 3 toros. Pero, claro, ello habría dado la posibilidad de devolver las entradas y esa solución puede ser gravosa para la empresa...

El cuarto toro, de la ganadería de Pallarés, galopa en la tercera entrada

Hoy Remi tenía poca clientela. Al saludarle sonrió sin alegría, encogiéndose de hombros y me invitó con la mirada a sentarme con don Venteño, que degustaba un pincho de tortilla jugosísimo.

- A las buenas noches. Me temía que hoy también hubiese pegado otra espantada como la de ayer.

- No crea que si no es por algún que otro detalle cojo las de Villadiego y no me pesca esta tarde. Pero al menos agradézcame el papel que le dejé, que le resolví cinco sextas partes de su tarea.

- Le debo una, don Venteño. Dice que sólo le han gustado algunos detalles. ¿Empezamos por ellos?

- Como guste. Por la parte de los toros, sólo los tercios de varas del cuarto y del sexto, ambos de Pallarés. El cuarto, por la forma de galopar desde casi los medios en la tercera entrada al caballo, aunque no se emplease de igual forma en el peto. Después quedó parado, muy noble, pero distraído y sin entrega en la muleta. El sexto, porque después de que Agustín Romero, en la primera entrada, le hiciese la carioca y le diese estopa, volvió a entrar otras dos, aunque tardease en la última. Éste se paró aún más en los demás tercios.

- ¿Se ha dado cuenta de que la diferencia de peso entre los dos era nada más y nada menos que de 144 kilos? Pero bueno, al picador le han dado la mayor ovación de la tarde.

- Parece mentira que se extrañe, amigo Cadahalseño, porque ya debería saber que esta plaza es así. El picador después toreó bien a caballo para citar al toro y clavó al puya en su sitio, es cierto, y con ello compensó ese gran pecado de incumplir el primer mandamiento del picador que es no tapar la salida al toro y medir el castigo en la primera entrada. Valorando lo malo y lo bueno no es para que el público se rompa las manos aplaudiéndole.

- ¿Y los otros detalles?

- Por la parte de los toreros, las verónicas del quite al tercero y los naturales de Iván Vicente a sus dos toros. Los que dio a su primero, un inválido y noble de Rehuelga, al final de la faena de muleta. Y uno largo y lento al cuarto, de Pallarés, al principio de la faena. ¡Ah! y esa estocada cobrada por derecho al primero. Y punto.

- ¿Punto?

- Punto. Lo demás, digno de enviarlo a la papelera de reciclaje. De los toros, puede salvarse el segundo, no por su pelea en varas, sino por su comportamiento noble y encastado en el tercio de muleta. Javier Cortés no estuvo a su altura y encima lo despachó con una estocada pescuecera.

- Pues le han hecho saludar por esa faena.

- Eso tiene dos explicaciones. La primera, que no se utiliza la condición del toro como vara de medir al torero, para bien o para mal. El de Pallarés resultó bueno para el coleta, porque era pronto y buscaba la muleta con suavidad y nobleza, o como dicen los taurinos, colocaba la cara. La segunda explicación es que esta plaza ha tomado cariño al madrileño, lo que no me parece mal, porque es un torero modesto que lucha con valentía en este mundo tan complicado. Pero usted fíjese bien que alterna el neotoreo, es decir, un toreo muy parecido al que vimos ayer, con otro más expuesto en el cite.

- El sobrero de Marca no le dejó hacer gran cosa. Era complicado.

- Efectivamente, sobre todo porque tenía genio y cabeceaba, pero no consiguió evitar que le enganchase la muleta. Y menos mal que se libró de milagro en la voltereta. Y del sablazo que le pegó en los bajos mejor no hablamos.

- Ya hemos hablado de los madrileños. Queda el sevillano.

- Poco y poco bueno podemos decir de Javier Jiménez. Tuvo un tercero de Rehuelga pastueño al que muleteó muy despegado y perdiendo muchos pasos, sin ligar las tandas, colocándose continuamente. Eso suele ser un indicio de falta de seguridad, o, como dicen los taurinos, de no tener sitio. Del sexto ya hemos hablado, cómo quedó parado y no dio opción de lucimiento alguno. Y no me pregunte más. Mejor repase sus fotos y hallará algo más, pero este cura se va ya a dormir.

Se levantó, cogió su sombrero, hizo un amago de despedida a Remi y le vi salir por la puerta muy erguido, como si fuera un chaval.

Cuadro de puntuación de la corrida de Pallarés (3), Rehuelga (2) y José Luis Marca (1)




jueves, 12 de octubre de 2017

Una corrida sin casta echa el cierre a la temporada. Las Ventas, 12 de octubre 2017

Las cinco de la tarde es la hora trágica y poética de los toros desde que Federico García Lorca lloró la muerte de su gran amigo Ignacio Sánchez Mejías en Manzanares. Pero las cinco de la tarde no es hora de toros en el siglo XXI. Parece como si la empresa tuviese prisa en echar la llave a la plaza, mejor a las siete que a las ocho, o como si quisiera ahorrarse una hora de factura eléctrica, sin pensar que hay muchos aficionados que tienen que despalazarse de 100 o más kilómetros para pasar una tarde de toros.

La plaza en pie escucha el himno nacional al final del paseíllo

El mundo de los toros está siendo uno de los más activos en el rechazo al conflicto político planteado por las autoridades de Cataluña, como también hoy se ha significado en Las Ventas, en su cierre de temporada taurina, coincidente con el día de la Fiesta Nacional. La tarde comenzó con el himno nacional y finalizó con la música del pasodoble 'Viva España', compuesto curiosamente por autores belgas, con muchas banderas nacionales en unos tendidos que han registrado menos de un cuarto de entrada, en tarde calmada, soleada y muy calurosa.

Tomaba antigüedad una ganadería, la de Salvador Gavira García, procedente de una partición de la de Gavira entre los hijos de Antonio Gavira Martín, que murió por un accidente en su finca en  el año 2005. La corrida, con cuatro toros cinqueños, estaba marcada con el hierro de origen. El balance no ha sido positivo, pues la tónica general ha sido su falta de casta en distintos grados, no sin esa nobleza bobalicona que se extiende por las dehesas de bravo.

A Daniel Luque le correspondieron dos toros cinqueños, uno primero aleonado y bien armado, que adoleció de falta de fuerza y tuvo una condición noble, que permitió algún lucimiento del sevillano en una serie de naturales. Lo liquidó de una estocada fulminante. El cuarto tuvo poca acometividad, frenado en sus embestidas, pero al que se podía hacer pasar tirando de él, con el que Luque recurrió al arrimón y a las luquesinas para animar, a pesar de la media estocada, a una escasa petición que fue atendida por el palco. Llamó la atención la claque que tuvo en el tendido 9.

Sebastian Ritter llegaba al final de temporada con una sola corrida y tuvo la suerte de enlotar a un segundo que salió sin entrega en el capote, pero que fua a más, hasta el punto de que por el derecho se toreaba sólo en la muleta de Ritter, que lo acompañó en series de noria o molinillo, y por el izquierdo había que torearlo y ahí no anduvo afortunado el colombiano. Se empecinó en la suerte contraria, con tres pinchazos que desinflaron cualquier deseo de premiar su labor. El quinto fue un toro pastueño, tanto que lo tuvo enganchado en el pitón a la altura del vientre y ni siquiera cabeceó, para suerte del coleta. Tras pinchar lo mató de estocada y se dio el lujo de dar una vuelta al ruedo por su cuenta, antes de pasar a la enfermería para ser atendido de un puntazo.

Javier Jiménez demostró seriedad y sitio y pechó con el peor lote. Hizo el quite más lucido de la tarde, al segundo, en una tarde en que se hicieron muchos quites, pero de poca entidad. El tercero no dio ninguna oportunidad, porque no hizo otra cosa que abrirse desde que salió. Lo mató de una estocada meritoria, porque el toro se habia distraído en el momento del cite. El sexto fue un manso deslucido que puso broche a una tarde gris.

En varas hubo mucho tiento en los picadores, se cuidó mucho y ningun toro cumplió en el peto.

Destacaron con los palos Juan Contreras, en el cuarto, y Abraham Neiro 'El Algabeño' e Isaac Galvín superando la falta de fijeza del doliente sexto.

Y así, a las 7.20 de la tarde de este 12 de octubre terminó la primera temporada de Simón Casas en Las Ventas, que, a grandes rasgos, no ha sido otra cosa que más de lo mismo. Las obras de reforma del edificio esperan y 2018 será otro año.

Disculpe el lector la ausencia de imágenes, pero una torpeza de quien suscribe ha impedido tomarlas.

Cuadro de puntuación de la corrida de toros de Salvador Gavira García

Me corto la coleta

Puede parecer pretencioso servirme de esta frase, reservada para los que del enfrentamiento con el toro han hecho su oficio, pero permítase...