lunes, 31 de mayo de 2010

Los toros de San Isidrito 2010

Terminado el atragantón de San Isidrito 2010, es oportuno publicar el resumen de lo más destacado de los cuadros de puntuación de los toros lidiados, con la excepción de la última corrida, del Marqués de Domecq, a la que no asistí, pues existía la posibilidad de devolución de entradas por sustitución de la anunciada de Adolfo Martín, y no la desaproveché. Las fichas individualizadas de cada una de ellas han sido publicadas en el blog (o lo serán en breve) junto con los respectivos comentarios.

El cuadro de toros que han obtenido una nota superior a 2,5 (sobre 5) es el siguiente:

Puesto
Puntuación
Nombre
Ganadería
Fecha
Torero

3,16
Lezirio
Palha
3º 28/05
F.J. Corpas

3,12
Cubilón
Puerto de San Lorenzo
6º 18/05
Rubén Pinar

3,00
Ribete
Cuadri
5º 23/05
Salvador Cortés

2,98
Famoso
José Luis Pereda
5º 07/05
Morenito de Aranda

2,88
Bonoloto
El Torreón
5º 28/05
Fernando Robleño

2,81
Marismo
Palha
2º 28/05
Fernando Robleño

2,80
Trompetaco
Samuel Flores
4º 26/05
J.J. Padilla

2,76
Guindoso
Dolores Aguirre
4º 09/05
Rafaelillo

2,70
Frijonero
Cuadri
3º 23/05
David Mora
10º
2,70
Pitinesco
Javier Pérez Tabernero
3º 27/05
L. Bolívar
11º
2,61
Picante
José Luis Osborne
2º 08/05
Uceda Leal
12º
2,57
Joyero
Conde de Mayalde
2º 27/05
Sergio Aguilar
13º
2,50
Pitillo
Los Bayones
2º 16/05
Emilio de Justo

Por tanto, de 96 toros, sólo 13 obtienen esta nota mínima de 2,5 puntos, lo que representa un ridículo 13% o, lo que es lo mismo, no llega a uno de cada ocho toros lidiados los que superan ese listón.

El cuadro de los peores toros, con puntuación inferior a uno es el siguiente:

Puesto
Puntuación
Nombre
Ganadería
Fecha
Torero

0,81
Cantarero
José Luis Osborne
5º 08/05
El Capea

0,96
Alucina
Juan Pedro Domecq
3º 21/05
Morante de la Puebla

0,96
Catasol
Fernando Peña
5º 09/05
Fernando Cruz

0,99
Talaverano
Navalrosal
3º 11/05
César Jiménez

El toro más ligero fue Bretón, de Bañuelos, con 502 kilos, y el de más romana, Duende, de Cuadri, que llevó la báscula hasta los 654 kilos. La media de peso se situó en 553 kilos, entre los 532 de la corrida de Pereda - La Dehesilla y los 606 de la de Cuadri.

Las puntuaciones de las seis ganaderías que han lidiado corridas completas son las siguientes:

Ganadería
Puntuación
Fecha
Cuadri
2,32
23/05
Puerto de San Lorenzo
2,13
18/05
Samuel Flores
2,08
26/05
Núñez del Cuvillo
2,03
19/05
Baltasar Ibán
1,85
20/05
J.l. Pereda - La Dehesilla
1,84
07/05
Garcigrande
1,81
15/05
Parladé
1,58
13/05

En cuanto a comportamientos (valorados de 0 a 5), las puntuaciones más altas fueron:

Aspecto
Ganadería
Puntuación
Fijeza
Puerto de San Lorenzo
3,00
Movilidad
Dolores Aguirre
2,80
Acometividad
Palha
2,60
Embestida al caballo
Cuadri
2,50
Embestida a los engaños
Dolores Aguirre /Palha
2,20
Fuerza
Dolores Aguirre
3,20
Nobleza
Cuadri
3,33
Fiereza
Palha
2,50

Mejor comportamiento tuvieron los novillos, pues de 18, siete destacaron con más de 2,5 puntos. Son los siguientes:

Puesto
Puntuación
Nombre
Ganadería
Fecha
Novillero

3,19
Relamido
Guadaira
3º 24/05
Escribano

2,71
Periodista
Guadaira
4º 24/05
A. Saldívar

2,67
Muletero
Moreno Silva
1º 17/05
Paco Chaves

2,56
Rociero
Moreno Silva
3º 09/05
A. Rosales

2,56
Virtuoso
Moreno Silva
6º 09/05
A. Rosales

2,56
Impositor
Guadaira
5º 24/05
L.M. Casares

2,50
Flor de Romero
Carmen Segovia
2º 10/05
Juan del Álamo

P.D. El sistema de puntuación puede consultarse pinchando en este enlace.




Lezirio (foto del blog Del toro al infinito)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

sábado, 29 de mayo de 2010

Tarde de toros y banderilleros. Las Ventas 28 de mayo de 2010

Llegábamos a la tarde más interesante desde el punto de vista ganadero, con los afamados toros de Palha, si bien don Joao Folque no consiguió lidiar la corrida completa, que hubo de ser remendada con dos toros de El Torreón, dos tíos con toda la barba que con su buen comportamiento han rematado una gran tarde de toros.

Jesús Millán desaprovechó un primer toro que cumplió en varas, causó muchos problemas en la brega a Casanovas, y que se dejaba por ambos pitones. El cuarto fue el toro de peor nota, le pusieron una vara de dos en una y acudió sin humillar en el segundo tercio; comenzó con un susto al caer Casanovas y levantarlo y encampanarlo Cesguno; sacó su casta el banderillero y colocó un par con decisión; tampoco se arrugó Arruga y puso uno bueno por el derecho; cerró el tercio Casanovas jugándosela de verdad hasta el punto de que el pitón izquierdo del toro golpeó el pecho de Casanovas; saludaron en medio de una ovación clamorosa ¡olé por dos toreros de una pieza! Millán se dejó enganchar la muleta y el toro fue de menos a nada.

Alto y poco ofensivo era el segundo, al que cuidó Bernal en el caballo y con el que se animó Corpas a un quite de verónica y media; se complicó en palos porque no le sujetaron ni cortaron cuando perseguía; fue pronto y noble para la muleta, pero Robleño desaprovechó estas cualidades y fue incapaz de dar un natural sin la ayuda del estoque; lo mató de un bajonazo yéndose. Cuajado y con mucha leña era el quinto de El Torreón , muy templado en lances de saludo; Robleño se desentendió del toro en los medios y Bonoloto se vino al de puerta que le dio trasero sin rectificar, se fue sólo al picador de tanda y empujó (fue una pena no poder ver cómo acudía a un tercer encuentro, porque prometía, pero qué se va a esperar de un presidente tan mediocre como don Trinidad); tuvo buen comportamiento en el segundo tercio; Robleño le planteó la batalla en las rayas de sol (suele recurrir a este pobre recurso) y, por desgracia no lo sacó de allí, dejandolo tropezar en la tela, sin dar salida, ahogándolo y sin sacar más que medios pases (que le aplaudieron), el toro acabó entregándose humillado y facilitando una buena serie que demostró cómo había despilfarrado el tesoro que albergaba este gran toro de César Rincón; murió de estocada fulminante. ¡Lástima que no se nos permitiera ver a este toro en los medios!

Francisco Javier Corpas quiso dejar clara su disposición desde el principio, yéndose a portagayola a recibir al tercero. Y lo que acabó dejando también cristalino es la falta de justificación de su inclusión en la feria. Lezirio empujó en el caballo, pero sin excesiva codicia; anduvo pronto y alegre en banderillas, poniendo en aprietos a los banderilleros; fiero en la muleta, desplazándose mucho y desbordando a Corpas, un toro que tuvo la desgracia (y nosotros también) de caer en estas manos, pero, pensándolo bien, nunca caerán estos toros en mejores manos porque las figuras no quieren ni olerlos. Murió de un metisaca en los bajos. El sexto de El Torreón era otro pavo al que metieron al relance en las dos entradas al caballo; lo banderilleó bien Miguel Martín; y Corpas incurrió en los mismos defectos que Robleño con el quinto (incluso llevándoselo también al sol), sin ser capaz de aprovechar la humillada embestida de Descarado, que por único defecto tenía un leve cabeceo. Murió aculado en tablas, tras pinchazo y descabello.

Cuadro de puntuación de la corrida de Palha del 28/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

Yo devuelvo mis entradas, ¿y usted?

Supongo que el lector compartirá mi impresión de que este San Isidrito 2010, a punto de concluir, ha sido, si no la peor, una de las peores ferias de San Isidro; acorde, por otra parte, con los carteles confeccionados por Taurodelta y aprobados unánimamente por la Cofradía del Amén a Taurodelta (CATCuento de Arreglos Taurinos).

No dejo de oír a los que acuden pacientemente a la plaza, ni de leer en los diferentes blogs, el lamento resignado de la tomadura de pelo de programar 30 festejos seguidos (San Isidrito más San Aniversario), cuando no hay ni toros ni toreros en España para dar festejos medianamente serios más allá de una semana. Pues bien, con el lamento y la queja educada de cada día no se arreglará nada.

Hace unos días, bajo la excusa de protestar contra la programación de la empresa, unos jóvenes periodistas airearon una iniciativa, con tufo a mangoneo, cuyo principal afectado, miren ustedes por dónde, era "El Cid". La propuesta, además de burda y absurda, acabó de la forma más ridícula.

Creo que hay una forma sencilla de rebelarse contra la situación, dando donde más le duele a la empresa (en el bolsillo) y, de paso, dejando en evidencia a ese organismo inoperante y superfluo que es el CAT, que hora es de suprimir aprovechando los recortes presupuestarios.

En ese apéndice, llamado Feria del Aniversario, habrá derecho a la devolución del precio de tres festejos: los días 3, 4 y 12 de junio, por las bajas de Aparicio y José Tomás. Y es posible que también la del día 1, si Curro Díaz no se recupera.

Yo pienso ejercer ese derecho como medida de protesta por la nefasta gestión de Taurodelta y de la inoperancia y complacencia del CAT. Soy consciente de mi insignificancia entre los 24.000 espectadores con derecho a devolución, y de que mi voz no llegará más allá del uno por mil de aquellos. Como protesta, sólo afectará a la empresa y al CAT si son miles los que toman la misma decisión, y los tendidos lucen ese color granítico esplendoroso de la plaza vacía. Pero como gesto, a mí me vale, y eso es más que suficiente. (Además, con el dinero de la devolución, me compraré esa botella de cognac caro que paladearé cada sábado recordando a quien debo agradecérselo).



Nota: El derecho a la devolución del precio de las entradas está recogido en el art 33 del Reglamento Taurino:

CAPITULO II
De los espectadores y de sus derechos y obligaciones

Artículo 33.1. Los espectadores tienen derecho a recibir el espectáculo en su integridad y en los términos que resulten del cartel anunciador del mismo. (...)

3. Los espectadores tienen derecho a la devolución del importe del billete en los casos de suspensión o aplazamiento del espectáculo o de modificación del cartel anunciado. A estos efectos, se entenderá modificado el cartel cuando se produzca la sustitución de alguno o algunos de los espadas anunciados o se sustituya la ganadería o la mitad de las reses anunciadas por las de otra y otras distintas.

La devolución del importe del billete se iniciará desde el momento de anunciarse la suspensión, aplazamiento o modificación y finalizará cuatro días después del fijado para la celebración del espectáculo o quince minutos antes del inicio del mismo en el caso de modificación. Los plazos indicados se prorrogarán automáticamente si finalizados los mismos hubiese, sin interrupción, espectadores en espera de devolución.

Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

viernes, 28 de mayo de 2010

Don Julio, el incongruente. Las Ventas 27 de mayo de 2010

Presidía hoy mi presidente favorito, don Julio "El mantenedor", otro aspecto más de lo devaluada que está esta plaza en casi todo.

Y, haciendo honor a su alias, mantuvo al primero, una especie de uro inválido que impidió cualquier posibilidad a El Fundi.

Pero mire usted por dónde, cuando menos se piensa salta la liebre y a continuación don Julio devolvió tres toros en menos de 10 minutos. Al segundo, un toro de la ganadería titular que no pudo completar su intento de salto al callejón por su evidente falta de fuerza y que claudicó en el caballo y en el quite de Sergio Aguilar. El segundo bis, de Hermanos Domínguez Camacho, se descordó en el quite de Luis Bolívar y, don Julio saltándose a la torera el Reglamento, ordenó su devolución, no sé si por la ley de las compensaciones que en el fútbol aplican los malos árbitros y que de esa manera se equivocan por duplicado (como curiosidad, el toro, que hubo de ser apuntillado en el ruedo, ¡fue ovacionado en el arrastre!). El segundo tris era un toro feísimo de Torrehandilla, cabezón seria la palabra que mejor le cuadraba y que cualquier parecido fenotípico con un jandilla sería pura coincidencia; a este le desgració con la puya Antonio Prieto hijo y de nuevo asomó el pañuelo verde en esta exhibición de inaudita prodigalidad de don Julio; ni que decir tiene que los cabestros volvieron a exhibir una limpieza insólita. Por cuarta vez recibió Sergio Aguilar a un toro, esta vez el segundo quarter, un sobrero del Conde de Mayalde que salió corto en el capote y que entró por primera vez al caballo haciendo sonar el estribo para quedar después fijo empujando largo rato hasta derribar y después seguir empujando al caballo reincorporado, sin poderle despegar ni coleándolo; tras ese comportamiento lo que correspondía era haberlo dejado largo para el segundo puyazo, pero Sergio Aguilar lo dejó dentro de las rayas (aquí si habría venido a cuento ese grito. casi siempre inoportuno, de ¡muyyy maaaaal!, pero no se oyó), y Joyero volvió a quedarse dormido en el peto. Buen primer tercio del toro del Conde de Mayalde, para contradecir aquella fama que tuvo la ganadería de huir en el tercio de varas y que, como cuenta Alfonso Ussía, dio pie a Matías Prats para un juego de palabras versificado, con ocasión de haber sido nombrado el conde de Mayalde alcalde Madrid por segunda vez:

«¿Mayalde otra vez Alcalde?
¡Cosa rara entre las raras!
Será el único mayalde
que haya tomado dos varas»


Al picador le gritaron por intentar salir por la puerta más cercana, olvidando los furibundos espectadores que la norma sobre sentido obligatorio ha desaparecido del Reglamento (que ya ni exigen los coruchos, sus más acérrimos defensores). Rebrincado en palos, se dolío y escarbó, y en la muleta acusó el castigo en varas, apenas se desplazó y se defendió por derecho y fue imposible por el izquierdo. Aguilar consiguió una gran estocada, tras un pinchazo.

Tras cinco toros, salío el tercero, que se quedaba corto y humillaba tanto que hizo el volatín y en la faena de muleta hundiría el pitón en la arena, sacándolo como una brocha; medio cumplió en el caballo y en palos; brindó Luis Bolívar a El Fundi, y dio distancias al toro en los medios, sacando dos series aceptables por el derecho, pero algo despegadas, se complicó por el izquierdo y volvió a sacar con mérito y emoción una tanda de tres derechazos y el de pecho, para rematar deslucido el trasteo; consiguió una estocada caída y tendida, atracándose de toro. Muy injusto el personal, le pitaron su labor.

El cuarto, justo de presencia, fue flojo en todos los tercios y suavón además en la muleta; o sea, un toro de hoy para toreros sensibles y bonitos, cualidades que El Fundi precisamente no atesora.

El quinto, vareado, también necesitaba una transfusión más que una vara. A este paso, habrá que ir pensando en sustituir a los caballos y picadores por unidades de la Cruz Roja. Don Julio volvió a hacer honor a su alias y mantuvo esta ruina, con la que Aguilar no hizo sino acabar recurriendo al arrimón, pasaportándolo de una buena estocada.

El sexto, otro inválido que se tragó el usía, sólo sirvió para que Leiro recibiese una ovación ¡por no picar! Hay que ver como está la afición de la Villa y Corte.

Cuadro de puntuación de la corrida de Javier Pérez Tabernero del 27/05/2010 en Las Ventas




(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

jueves, 27 de mayo de 2010

Menos mal que falta poco. Las Ventas 26 de mayo de 2010

Llegaban los samueles precedidos de temporadas de insufrible flojedad, y el vareado primero (que de Gamero Cívico tenía lo que yo de flamenco) me hizo temer lo peor: inválido, lo que no impidió que los tres diestros pareasen esta ruina. El segundo, ya sí, badanudo, fue un toro descompuesto y rajado, con el que los tres toreros, dieron un mitin con las banderillas, incapaces de fijar al toro, teniendo que ser Julio Campano quien sudase en la brega con susto incluido al caer de espaldas ¡e intentar levantarse cuando el toro le buscaba! El que se cerrase en tablas no justifica los sablazos que le pegó Encabo. En el tercero, escaso de culata, volvieron los espadas a banderillear y de nuevo necesitaron el auxilio de un subalterno, en esta ocasión Iván Romero (y su tieso capote); no se empleó en la muleta pero era pronto y revoltosillo, e Iván García no hizo cosa distinta a quitarle unas invisibles moscas. Bien armado era el cuarto, al que Padilla recibió con tres largas cambiadas de rodillas y unos horribles lances de paso atrás; cumplió Trompetaco en el caballo, fijo y empujando, con una primera vara muy larga y una segunda breve tras ponerlo Padilla muy bien en suerte; quite muy malo de Encabo y pésimo tercio de palos de Padilla, que intentó compensar con una cuarto par al violín después de haber sonado los clarines; brindó al público llevándose la montera al regazo y empezó la faena por alto obligando al toro innecesariamente, fue incapaz de llevar por abajo al toro, que era pronto, dio demasiados trapazos y toreó muy aliviado, sólo al final descubrió la extraordinaria calidad del toro (sobre todo por el izquierdo), que hizo un amago de rajarse; la estocada fue rinconera y la oreja regalada a un torero que dejó irse un toro sin torear. El quinto era espectacular de cabeza, veleto, afilado y cuajado; manseó en el caballo, anduvo descompuesto y sin fijeza en palos, donde naufragó Porritas, y quedó crudo y rebrincado en la muleta, sin que Encabo le recetara el jarabe de obligados que necesitaba el animal; pinchó repetidamente huyendo del fielato. El sexto salió soso y parado, se repuchó en el peto, le banderilleó mal Iván Romero, siendo necesario un cuarto par bueno de Sierra; llegó guardándose cosas a la muleta e Iván García le robó dos buenas series por el izquierdo, pero después se equivocó al dar distancias a este toro al que había que llevar muy tapado; terminó con una meritoria de naturales cuando el toro ya se entregó algo más; acabó De Velilla (vaya nombrecito) aconchado en tablas después de la estocada.

A estas alturas ya empieza a resultar complicado aguantar una corrida de estas características. ¡Menos mal que falta poco!


Cuadro de puntuación de la corrida de Samuel Flores del 26/05/2010 en Las Ventas






(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

miércoles, 26 de mayo de 2010

Ensalada insípida. Las Ventas 25 de mayo de 2010

El genial Luis García Berlanga incluyó en su película Calabuch una escena en la playa de Peñíscola donde aparecía el recordado José Luis Ozores interpretando a un modestísimo torero que se contrataba llevando en su camioneta también a la res a la que toreaba y que, una vez finalizado el espectáculo, volvía a subir al vehículo para la próxima actuación.



La contratación por lotes de torero y los toros que va a lidiar ya no es una licencia del cine, sino que de un tiempo a esta parte se ha impuesto en la Corrida de la Prensa de Madrid, con el beneplácito de la autoridad (léase vista gorda). Cada torero viene con sus dos toritos (un kit, que se dice ahora). El resultado es una ensalada de toros elegidos por cada torero, que ha resultado de lo más insípido.

El kit A lo componían El Juli y dos toros de La Quinta y Victoriano del Río, que se corrieron en primero y cuarto lugar. El primero fue un santacoloma aborregado y flojo, con el que simuló la suerte de varas y que sirvió al de Velilla para entrenarse a plaza llena y dar el mitin con los aceros: dos pinchazos, una media y cinco golpes de verduguillo. El quinto, que estuvo querencioso en el peto, fue un toro sin poder y que acabó aplomado; en justa correspondencia, El Juli acabó pesadísimo y de nuevo estuvo reñido con el estoque: dos pinchazos, una estocada honda y dos descabellos.

El kit B lo formaban Miguel Ángel Perera y dos toros de Núñez del Cuvillo y del Ventorrillo. El inválido segundo no se picó tampoco; los capotes tan altos que parecían sábanas para tender y la muleta a media altura para que el clamocheante cuvillo no aterrizase; lo despenó con una honda. El quinto empujaba con fijeza al caballo, mas sin poder; el de Puebla de Prior a lo suyo con la muleta: estatuarios, toreo de carrusel y arrimón; tras un volatín perfecto, de lo humillado que iba el toro, lo pasaportó de un pinchazo, estocada tendida y pasada y golpe con la cruceta.

El kit C se anunciaba con Cayetano y toros de Jandilla y Carmen Segovia, ambos rechazados por falta de trapío y sustituidos por otros de Domingo Hernández y Toros de Cortés. El tercero fue un toro sin codicia, al que apenas se picó, al que Cayetano colocó en suerte en las rayas, y que con la muleta empezó en el tendido 7, con pases de guardabarrera, y acabó en el 1 con teletoreo, destemplado y  ayudándose en los naturales; le atizó un horrible media sin soltar, tras la que pinchó y acabó con una estocada tan atravesada que hizo guardia. El sexto, feo por cornivuelto y contrahecho, muy flojo, cuidado en varas y claudicante en la muleta; la tarde acabó entre olés de rechifla que no convencieron al madrileño para acabar con el paripé. Terminó con pinchazo y estocada.

Lástima que los kits no los vendiera el Corte Inglés, porque así nos habrían devuelto nuestro dinero, dado que satisfecho no quedó nadie.

Por destacar algo en esta tarde soporífera, buenos con los palos Joselito Gutiérrez en el segundo y el Niño de Leganés en el cuarto.

Al final, tras la minirecepción oficial, Paquita se encontró cara a cara con Cayetano y sacó la conclusión de que "tampoco es para tanto". ¡Pués si tampoco sirve para modelo...!

Cuadro de puntuación de la corrida de la Prensa del 24/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

martes, 25 de mayo de 2010

El término "manejable". Las Ventas 24 de mayo

En el argot, llámase "manejable" al toro que permite estirarse lucidamente al diestro sin excesivo riesgo y sin demasiados agobios; es decir, un toro que ni es complicado ni es codicioso. Y esta tarde ha sido una de las que permite explicar el concepto y sus matices.

El primero, corretón y huidizo al principio y escupiéndose del peto en tres ocasiones, llegó noble y sin fuerza alguna al último tercio. No pudo alcanzar el calificativo de manejable, porque su invalidez impidió todo lucimiento a Saldívar.

El segundo, sin trapío alguno, cumplió en varas pero careció de codicia. Aunque punteaba, fue noble y manejable en potencia, porque Casares no sacó lucimiento alguno.

El tercero, después de salir frío y sin empuje en el peto, persiguió en palos y fue a más en la muleta, donde empezó brusco pero fue ahormándose gracias al temple de Escribano y acabó codicioso. No puede decirse que fuera manejable porque fue bravo y acometió con fiereza y sin humillar(recuerden la advertencia del torero veterano al novel ilusionado: "pide que no te salga un toro bravo"). Destacaron: el picador, Israel de Pedro, que señaló en buen sitio en las dos varas y citó con buena monta en la segunda, y el buen tercer par de Jesús Alonso.

El cuarto no se empleó en los lances de recibo, empujó en el caballo, donde le dieron a modo; puso en problemas a los banderilleros y llegó con genio a la muleta, cabeceando y ciñéndose, con los consiguientes problemas para Saldívar. No fue manejable, sino complicado por ser un auténtico novillo de lidia.

El quinto, cuajado, irrumpió con fijeza en el capote y metiendo los riñones en el primer puyazo, saliéndose del segundo después de haber entrado al relance. Siguió acometiendo en palos, donde se lució Pedro José Mariscal, pero quedó algo reservón para la muleta, en la que necesitaba ir tapado, que fue precisamente lo que no hizo Casares. Fue manejable, pero de nuevo Casares no supo darle la lidia necesaria.

El sexto salió abanto y manseó descaradamente en el caballo, descompuesto en palos, donde expuso Luis Miguel Camapano, al que persiguió con peligro, y rebrincado y bravucón en la muleta, con el que Escribano no pudo o no supo acoplarse. Obviamente, este tampoco fue manejable, sino complicado.

De agradecer en los tiempos que corren que los novilleros intentaran hacer quites artísticos, con desigual fortuna. Anotemos como buenos los de Escribano por chicuelinas al segundo y el rematado toreramente por Saldívar en el tercero.

Cuadro de puntuación de la novillada de Guadaira del 24/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

lunes, 24 de mayo de 2010

Nobleza inesperada. Las Ventas 23 de mayo de 2010

Había expectación por comprobar el estado de esta ganadería que tradicionalmente se ha adscrito al encaste santacolomeño, de forma más que cuestionable.
Don Fernando Cuadri, ganadero de toros de lidia (quedan pocos que puedan calificarse como tal), se trajo seis toros voluminosos, con una romana por encima de los 600 kilos y con esa seriedad que les da su hondura y su amplia badana.
Venían además con esa vitola de divisa dura, que corroboraba en su modestia el cartel de matadores. Pero nada más lejos de la realidad, los cuadris han destacado precisamente por su nobleza, por más que los aplausos en el arrastre del sector denominado “duro” puedan dar a entender un comportamiento encastado. No es posible hacer la prueba, pero creo que si el aspecto de los toros hubiese sido parladé y se hubieran anunciado con el apellido Domecq, poco se habría hablado hoy de los toros.
En general, han cumplido en el caballo y alguno ha sido excesivamente castigado, más por respeto al hierro que por su acometividad. El peso ha sido un lastre para su movilidad, donde menos han puntuado, con la excepción del 5º, el mejor del encierro, aunque no el más noble.
López Chaves es otro de esos toreros cuya inclusión en la feria no tiene justificación. Y hoy lo ha demostrado. Su primero salió mirando por encima de las tablas, lo pusieron en suerte dentro de las rayas y F.J.González fue contumaz en picar trasero en una primera vara larga, de la que salió perdiendo las manos; la segunda vara fue breve y también trasera. Mal, muy mal banderilleó Porritas. Barbacoa quedó pastueño, además de flojo, y el salmantino no supo aprovecharlo, siempre perfilero y aliviado. El cuarto salió andando y olisqueando; llegó al peto y pegó un respingo al sentir el hierro, saliendo de naja, empujó con genio y cabeceando en la segunda vara, poniendo la cara en la silla de montar, terminando con un tercer encuentro más breve; llegó sin definir al último tercio, desplazándose pero López Chaves no supo dominarlo, perdió demasiados pasos y se alivió en exceso con la zurda; al final, quedó Duende aplomado y terminó muy feamente de metisaca trasero y bajonazo.
Salvador Cortés es torero de Sevilla, por nacimiento y por triunfos en La Maestranza, que no en Las Ventas. El silleto segundo fue el animal de menos presencia; salió echando las manitas por delante; empujó por delante en la primera vara, poniendo en apuros a Carbonell, que lo sujetó bien, y la segunda, tras tardear, fue un picotazo pero en buen sitio (o sea, en lo alto del morrillo, ese sitio donde raramente clavan los de aúpa); muy malo fue el segundo tercio, con seis entradas y un lamentable Juan José Domínguez; no sé qué vería el diestro en el toro para brindarlo a la concurrencia y comenzar citando en los medios, el caso fue que no hubo más que enganchones y, tras volver al tercio, se quedó afónico de jes y jus provocadores para intentar que embistiera. El quinto, de color castaño, raro en la ganadería, salió parado, empujó con poder y la cara alta en la primera vara, poniendo en aprietos a Agustín Romero (que había marrado), que hubo de picar desde el estribo, para en la segunda quedar fijo en el peto, pero sin empujar. Echó la cara arriba en palos y puso en apuros a Luis Mariscal que con enorme exposición puso un par asomándose al balcón. Quedó con genio y cabeceo y Salvador no supo resolver el defecto ni tampoco aprovechar la buena repetición que Ribete ofrecía por el derecho; se alivió para matar.
La carrera de David Mora se ha ido fraguando y cociendo de manera lenta y pausada”, decía el programa oficial, y no parece que con la tarde de hoy vaya a acelerarse. El tercero era voluminoso y en tipo; derrotaba en los burladeros y lo recibió en el estribo, sacándolo a los medios. El primer puyazo fue trasero, empujó fijo y hubieron de sacarlo, si bien volvió al peto; destacó la media del quite de Mora, que lo dejó muy bien en suerte para un segundo puyazo más breve y bien colocado. Destacaron los tres pares de Rafael González y Manuel Martínez y la buena brega de Cervantes. Quiso el madrileño iniciar la faena en los medios, pero Frijonero dijo nones, se acercó al tercio del 7 (donde más aire hacía) para conseguir una serie tropezada, a pesar de que el toro humillaba; metió bien la cara, muy templado; no se acopló Mora a ese son y aunque consiguió naturales largos desperdició la ocasión; lo despachó de una bajonazo y el animal murió de pie, pero en las tablas. Blando de salida fue el sexto, a pesar de lo cual le dio Herrero en la primera vara; siguió flojo en palos, pero sin ponérselo fácil a los banderilleros. Mora no le cogió el aire ni las distancias con la muleta, donde Infante acabó apretando y metiéndose por dentro; quedó inmóvil en la suerte suprema y aconchado en tablas; seis pinchazos, en uno de los cuales el estoque saltó al callejón, y un descabello (sin haber clavado el estoque) necesitó para liquidar al manso.
Las reacciones del personal son imprevisibles y el ruedo acabó lleno de almohadillas.


Cuadro de puntuación de la corrida de Celestino Cuadri del 23/05/2010 en Las Ventas



(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

sábado, 22 de mayo de 2010

La degeneración del toro de lidia. Las Ventas 21 de mayo de 2010

La corrida de hoy ha quedado marcada por la cogida de Julio Aparicio al inicio de la faena de muleta del primero, al que Opíparo caló por debajo de la mandíbula y el pitón salió, afortunadamente, por la boca. Este detalle no se apreció en la plaza y pude verlo a la salida en la pantalla de la cámara de Rafa Carlevaris. Antes, Aparicio se había lucido en los lances de saludo, Otero había saludado en palos, y el madrileño no le había cogido el aire a este animal descastado que le derribó con una pata, sin que el torero acertase a evitar el percance. Morante acabó con el jabonero.

Este suceso alteró el normal desarrollo del festejo y trastocó además la absurda seudohuelga que unos jóvenes habían aventado en la red y por SMS para protestar teóricamente contra la empresa por haber elegido a El Cid para sustituir a Manzanares. Todo consistía en abandonar temporalmente los tendidos en la lida del tercer toro y la cosa terminó en el mayor de los fracasos.

Además de matar al primero, Morante de la Puebla lidiaría, en orden alterado, el tercero y quinto tris (porque el quinto de Juan Pedro y el quinto bis de Gavira serían devueltos a corrales, acompañados por esos cabestros de Florito, eficacísimos y que llaman la atención por salir sin una sola suciedad ¿cómo lo consigue?). El tercero era un inválido que no merece más atención. El quinto tris, de Mari Carmen Camacho salio con genio y le sujetó Morante en las rayas del 7 con una verónicas firmes de mucho mérito, más emocionantes que las excesivamente jaleadas del posterior quite; picó bien Aurelio Cruz, por señalar en su sitio, y ya no hubo nada más que hacer porque el toro ni siquiera pasaba.

Por lo dicho, El Cid hubo de lidiar tres toros.
El segundo salió ya picado e iría a menos aún, y no tuvo más historia que levantar los pies al de Salteras al que campaneó aunque sin apenas elevarlo por su absoluta falta de fuerzas. El cuarto de Juan Pedro no se sostenía en pie y fue devuelto y sustituido por un terciado de Gavira, bien puesto, corretón de salida y muy manso en los caballos; muy buen tercer par de Alcalareño, dejando llegar al burel, asomándose al balcón y saliendo andando; muy flojo en la muleta, El Cid le sacaría dos series, una con cada mano, templadas y despaciosas para liquidarlo de una honda tendida. El sexto (que era el cuarto que había enlotado Aparicio por la mañana) fue también flojito y si sirvió en la muleta fue por el cuidado del picador y el mimo de la brega de El Boni; parearon muy bien y con riesgo los banderilleros de Aparicio, Rafael González y Llaverito, que saludaron; volvieron las distancias a Las Ventas al inicio de la faena de El Cid, con buenas series ligadas por el derecho, por el izquierdo entraba descompuesto y ahí se acabó el toro; lo mató de un estoconazo en las péndolas que ayudó a la petición mayoritaria.

Los juanpedros fueron un muestrario de la degeneración del toro, que ya no puede llamarse de lidia: salieron ya ahormados, no tuvieron poder, ni fuerza, ni codicia. Pero ya lo ven, son los que exigen las figuras para anunciarse en Madrid (y en tantas otras plazas).

Cuadro de puntuación de la corrida de Juan Pedro Domecq del 21/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

viernes, 21 de mayo de 2010

Sólo sé que no sé nada. Las Ventas 20 de mayo de 2010

Esta ha sido una de esas tardes que salgo confundido, sin una idea precisa de lo que ha pasado ante mis ojos.

No sé si los toros de Baltasar Ibán han sido los responsables de tan grisáceo festejo, o han sido los diestros quienes han sido incapaces de descubrir la potencialidad de los astados.

No sé si los toros de Ibán estaban bien o mal presentados, por vareados y/o degollados (salvo el aleonado y serio sexto), o más en el tipo de contreras que la de juanpedro.

No sé si es plausible envolverse en la senyera y cubrirse con barretina, para reivindicar la catalanidad del toreo.

No sé si los lentos naturales de Serafín Marín al segundo, arrastrando la muleta por la arena, habrían sido posibles metiéndose al toro más para adentro y agarrando el estaquillador más centrado.

Ante tanta duda, podría haber tirado por la calle de en medio (o por la contraria) poniendo a los espadas como no digan dueñas, (manteniendo que se habían dejado escapar la corrida), o despotricar contra el ganado (defendiendo que su mansedumbre era incompatible con el lucimiento). Pero, como algún torero que yo me sé (y el lector, si es fiel, adivinará), yo no sé taparme.

Dicho lo cual, me tiro al ruedo y doy mi impresión nada firme: la terna ha estado por encima de los flojos ibanes. A ello quizás contribuya que no esperaba nada de Eugenio de Mora ni de Serafín Marín.

Bien es cierto que Luis Bolívar posiblemente se equivocó doblemente en el sexto, un cinqueño de seis yerbas, primero dejando a Leiro (que olvidó la doble entrada exigida en plazas de primera) castigarlo excesivamente en un primera vara en que el toro se empleó y metió los riñones, y después iniciando la faena con un cite en los medios, dejando que se estrellara con la muleta en el cambiado por detrás (y por partida doble), en vez de tantearlo templadamente.

De lo que estoy seguro es que me gustaron esos naturales (bien es cierto que despegados) de Serafín Marín al segundo, la gran estocada de Eugenio de Mora al cuarto, y el tercio de varas de Domingo García al cuarto. Suficiente para no salir deprimido.

Cuadro de puntuación de la corrida de Baltasar Ibán del 19/05/2010 en Las Ventas
(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)

Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

jueves, 20 de mayo de 2010

¡Os vais a ir al paro! Las Ventas 19 de mayo de 2010

El grito se oyó cuando un picador se retiraba (para patentizar que ayer se simuló la suerte de varas), pero en realidad el centro de la diana eran los taurinos y sus periodistas de cortejo (cuyo nombre omito para que no sea todo esto "sobrecogedor"), responsables de la actual Torerimaquia (tauromaquia sin toro de lidia), que gira sobre ese concepto meramente estético de la muleta y para el cual se ha "fabricado" un torito débil, necesitado de cuidados desde su salida hasta el toque de clarín que anuncia el último tercio, donde debe demostrar su "calidad" para seguir obtusamente la muleta.

La corrida de Núñez del Cuvillo, la preferida por las figuritas, corifeos y gente del clavel, estuvo mal y desigualmente presentada, no se picó y "se dejó".

No compareció Manzanares, pero sí el rejoneador que coló de rondón para no abrir el festejo.

Le sustituyó Curro Díaz, que vino a devolver la orejita del otro día.

Miguel Ángel Perera se llevó una orejita de "todo a cien", que el personal tuvo el capricho de pedir. Le duró muy poco, porque la devolvió en el quinto, al ayudar a no devolver un auténtico inválido.

Talavante fue el único que dio algunas series airosas de naturales (que fueron muy jaleadas), acompañadas de muchas más deslucidas y enganchadas (que fueron jaleadas igualmente).

Julio Martínez, el usía mantenedor, ahorró un nuevo sobrero a la empresa, ¡cómo no!

Y no me da la gana escribir más sobre esta basura (y perdone el lector el exabrupto).

Cada vez se va extendiendo más el convencimiento de que no van a ser los antitaurinos, precisamente, los que se carguen esto.

Cuadro de puntuación de la corrida de Núñez del Cuvillo del 19/05/2010 en Las Ventas

(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

miércoles, 19 de mayo de 2010

Desperdicios. Las Ventas 18 de mayo de 2010

El titular no tiene relación con Manuel Domínguez "Desperdicios", aquel diestro del XIX que cuentan debe su apodo a la frase que pronunció al entrar andando en la enfermería de la plaza de El Puerto de Santa María, después de que un toro de Concha y Sierra le diera una cornada y le dejase el globo ocular colgando: “Esto no son más que desperdicios”.

Los desperdicios a los que me refiero son los derroches que los tres espadas hicieron de la boyantía de los lisardos de don Lorenzo Fraile. Una tarde que es buena muestra de la penosa situación actual de la mal llamada Fiesta: ha habido material, cinco toros aptos para el triunfo, y en el cartel tres toreros de los de arriba del escalafón: pues bien, no se ha escuchado ni una ovación cerrada ni, por supuesto, se ha dado una mala vuelta al ruedo.

El domingo pasado, tres diestros, que sumaron 18 corridas en 2009, se dejaron ir algunos toros noblotes de Los Bayones y Pereda. Esa falta de rodaje puede hacer disculpable su fracaso. La terna de hoy sumó 146 corridas en 2009; así que ni por ahí pueden escaparse.

La corrida ha estado muy bien presentada, pareja de cajas y muy serios por delante, en especial los llamativamente astifinos 4º y 5º (¿sólo por las fundas?). En cuanto a su juego, puede resumirse en esa palabra de uso común entre los taurinos: servían. No eran toros poderosos ni bravos, salvo el último, sino nobles y con ese mínimo de movilidad y acometividad que permite el lucimiento de los de luces; toros modernos, o sea. Digamos, en definitiva, que en comportamiento han sido casi la antítesis de los saltillos de Moreno Silva de ayer.

Manuel Jesús "El Cid" quiere y no puede, y no saben ustedes cuánto me cuesta comprobarlo cada vez que lo veo. Si le caen hace tres años sus dos toros de hoy, la plaza se viene abajo. El primero salió soso y flojeando, apenas se le picó, y no acabó de romper en la muleta, probablemente porque el de Salteras tenía aún más dudas que el toro; lo mató de notable estocada. El cuarto, frío de salida, fue picado muy malamente por Juan Bernal, pero, tras un quite insustancial de El Cid, llegó claro, franco y repetidor por ambos pitones a la muleta del diestro, que eligió acertadamente los medios, pero que fue incapaz de conseguir una serie redonda; sólo dibujó un gran natural, eso sí, y trató siempre de citar honradamente dando el medio pecho, pero el buen son de Cartuchero era para descerrojar la Puerta Grande. Para colmo de males debió de cerrar los ojos al entrar a matar porque no atinó con el toro y salió trastabillado por la penca.

Sebastian Castella ha hecho el intento de torear; y debía concluir añadiendo "y punto", pero mejor me explico. Se había animado Sebastian en el primero de El Cid a hacer un quite, pero decir que era por "gaoneras" es casi pecado, porque ese lance, de corto recorrido, exige que se trate de embarcar al toro con el exterior del capote y llevarlo toreado hasta vaciar su embestida por detrás; el francés se limitó a mover el capote para llamar la atención del toro y procurar quitárselo bruscamente cuando llegaba a jurisdicción. En el segundo de la tarde, tras un enganchón de saludo, lanceó aceptablemente por verónicas; el toro se quedó en el peto en la primera vara, mas cabeceando, y se escupió en el segundo encuentro; Bailador llegó a la muleta justo de fuerza, noble y humillado y Castella tardó siete series, aunque no lo crean, en buscar el acostumbrado arrimón, al que sumó manoletinas y trincherillas. Pero la noticia es que intentó torear de largo durante seis tandas; eso sí, de forma aliviada y mecánica. Mató mal (si no alguna oreja le habrían regalado) y terminó entre las patas del animal después de haber sido encunado en un descuido. Lo peor de Castella, y ha de censurársele, fue su voluntad de mantener en la arena a un toro, el quinto, que no se sujetaba en pie y ni siquiera podía desplazarse. Muy mal hizo don Trinidad en no devolver al inválido, seguramente por esa absurda teoría que exclusivamente atiende para tal fin al hecho de que el animal claudique y lo haga de forma reiterada. No es eso lo que dice el Reglamento Taurino:
Artículo 84. 1. El Presidente podrá ordenar la devolución de las reses que salgan al ruedo si resultasen ser manifiestamente inútiles para la lidia, por padecer defectos ostensibles o adoptar conductas que impidieren el normal desarrollo de ésta.
Que el quinto era "manifiestamente inútil" para la lidia, por no poder siquiera desplazarse, ha quedado de sobra acreditado, por si hiciera falta, en la faena de muleta.

De Rubén Pinar pueden decirse mil cosas y ninguna buena. Hizo dos quites y los dos por chicuelinas mentirosas. Con el tercero de la tarde, tras una simulación de la suerte de varas, realizó toda una demostración de toreo vulgar (pases de guardabarrera, postura de alcayata en derechazos y naturales vulgares, periféricos y enganchados) para acabar desbordado y liquidando al animal de estocada baja. Lo peor para él vino en el sexto, un precioso toro veleto que salió abanto y sin clase, echando las manitas por delante y sin terminar de pasar en los lances de saludo; pero que mejoró notablemente después de una gran tercio de varas que protagonizó Daniel López y que conviene reseñar. Fueron dos entradas al caballo, y en la dos el picador echó la vara, señaló en el morrillo y sujetó con firmeza y sin barrenar el tibio empuje del cinqueño. Sobresalió también Manuel Montoya en palos, en especial por ese andar decidido con las banderillas en cada mano; el susto se lo llevó Juan Rivera al caer en la misma tronera del burladero. En la faena de muleta rompió Cubilón, noble, templado, codicioso, humillado, haciendo el avión por el derecho y yendo muy largo por el izquierdo; es decir, con todas las condiciones para ser toro de esos que, en Madrid, en San Isidro y con las cámaras de TV, llaman de cortijo, y de los de diez mil hectáreas de finca. Rubén Pinar tuvo la mala suerte (y nosotros también) de que le tocara a él en suerte. ¡Qué desperdicio!

Cuadro de puntuación de la corrida del Puerto de San Lorenzo del 18/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

martes, 18 de mayo de 2010

La novillada de Moreno Silva vista por Miguel Moreno

SAN ISIDRO 2010. NOVILLADA DE MORENO SILVA


Acepto los comentarios que se hacen de la novillada de ayer. Muchos no los comparto. Una cosa está clara y es que ya se ha debatido más de esta novillada que de todo lo que llevamos de serial. Esta novillada no es ni más ni menos que la consecuencia lógica de criar un toro con la vista puesta en el espectáculo y no en servir a un determinada idea. Cuando se busca un animal con casta, pujanza, movilidad, acometividad, integridad, repetidor y que se crezca en el castigo sucede lo de ayer lunes. Evidentemente también puede brotar la casta mala junto a la mansedumbre y las complicaciones pero pienso que eso es normal, ¿o no? Yo tengo dos hijos y cada uno tiene su propia personalidad. A cada uno debo "lidiar" de una forma determinada porque soy su padre. Si alguno me hubiera salido torero (imposible) debería haber estado preparado para lidiar el toro bravo, encastado y noble y asimismo para lidiar el toro manso, encastado y "avisado".

Nadie dijo nunca que esta profesión fuera fácil, más bien todo lo contrario. Yo puedo decir que la novillada me tuvo en permanente expectación, algo que no me había sucedido el resto de la Feria, excepción hecha de los "doloresaguirre", ayer permanecí pendiente de todo lo que sucedía en el ruedo. Por eso me dí cuenta de la inmensa afición, profesionalidad y amor propio del torero Domingo Navarro (¡OLÉ TORERO!). Me percaté también cómo los, a la sazón, sensibles mulilleros pasearon al primero lentamente para que recibiera el homenaje (para mí merecido) que le tributaba la mayoría de la plaza. No sé si sería bravo o no, pero a mí me emocionó ver ese embestir incansable, esa búsqueda permanentemente de pelea y cómo esa plaza en ningún momento distrajo su vista de lo que sucedía en el ruedo.

¿Cuántos puyazos recibieron y cuántos espadazos padecieron los utreros y seguían resistiendo con encastado "amor propio"? ¿Acaso vemos eso muchos días? Sinceramente: ¿Alguien puede decir que se aburrió? Para servidor, lo que ocurrió ayer tarde en Las Ventas está más cerca de lo que yo espero del toreo que de lo que sucede en la mayoría de las corridas. Habrá personas que no opinen igual y me parece correcto, cada uno somos como la Naturaleza nos hizo y aún peor muchas veces; por tanto, bienvenidas sean las diferencias y las discrepancias que sean fruto de la buena fe y no generadas por intereses.

Salía de la plaza pensando: Si esto aconteciera con mayor asiduidad, el toreo no necesitaría que nadie lo defendiera: su autenticidad extrema se bastaría para hacerlo por si solo. No es lo mismo ver a un ser vivo luchar demostrando a los demás su superioridad manifiesta que verle humillado -fuera y dentro de la plaza- por hombres que solo buscan su beneficio personal. Ellos persiguen correr el menor riesgo posible (lógica humana) pero provocan así que se inviertan estos términos hasta desvirtuar la verdadera esencia de esta liturgia conmovedora por taurina.

Y añado convencido: exceptuando a algunos (pocos) maestros auténticos, que no les voy a nombrar por no herir susceptibilidades distintas a la mía, la mayoría de los mejor colocados en el escalafón superior habrían naufragado como los bisoños novilleros que les cupió en desgracia la novillada de Saltillo. Si somos aficionados con amplitud de miras debemos respetar que también existan animales asaltillados y no únicamente la rama Domecq. Es la garantía de que esto es grande y amplio y podemos tirar de otras estirpes para regenerar esta Tauromaquia cuando le llegue su, presiento, cercana peor hora. ¿O es que estamos tan acostumbrados al toro bobalicón que ya no cabe en nuestra cabeza otro toro distinto porque enseguida pensaremos que así no se puede hacer el toreo actual? ¿No sería más acertado decir que el toreo es la capacidad que tiene cada lidiador de adaptarse a las condiciones de cada burel sin hurtarnos la posibilidad de ver esas interesantes lidias? Se me antoja que en este supuesto sabríamos sin disimulo quién es la auténtica figura del toreo. Sería -creo yo- muy fácil comprobarlo: cuando contempláramos a un matador torear con muleta angelical a un toro dócil y lidiar con látigo dominador a un toro semejante al cuarto o quinto de Moreno Silva.

El toreo encierra mucha más grandeza que lo que nuestros estímulos son capaces de captar. De ahí esa magnificencia misteriosa y arrebatadora que un día me conquistó. No rebajemos la exigencia sensata que hace posible que esto no desaparezca, si lo hacemos con ello rebajamos nuestra propia razón de ser aficionados. Me temo que, una vez más, me he ido por los cerros de la utopía. No en vano puse a la entrada de mi casa cadalseña un azulejo con la palabra: "Utopía".

Miguel MORENO GONZÁLEZ

Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

Novillos antiguos y novilleros modernos. Las Ventas 17 de mayo de 2010

Tarde intensa y de muchos matices la de hoy en Las Ventas, que compensa esas otras muchas tardes de sopor propiciado por la habitual presencia del torito flojo y descastado que inunda las dehesas españolas.

Tarde de mar rizada en la que han naufragado aspirantes a patrón de barco y marineros profesionales que demostraron no conocer más reglas que las de navegación en charco de agua.

No crea el lector que los novillos fueron bravos, sino encastados, aunque haya aficionados que nieguen esta calificación cuando hablamos de "mala casta". Su presentación y comportamiento fueron de lo más variado. Cárdenos todos, un sexto de preciosa estampa, pero un bebé de cara el primero. De comportamiento, hubo un novillo noble y claro (el 2º), tres regulares (1º, 3º y 6º) y dos mansos de solemnidad (el 4º, que debió ser "fogueado", y el 5º). Sólo el sexto, demasiado castigado en varas, cumplió en el caballo, pues los otros tres que aceptaron la pelea lo hicieron sin fijeza, con la cara alta y acabaron saliendo sueltos. Por matizar la calificación de "regulares" de 1º y 6º: el primero pudo ser el mejor en la muleta, pero esa continua mirada a los tendidos a la salida de los pases, olvidándose de lo demás, fue un defecto importante; el sexto apuntaba mucho, pero los dos puyazos excesivos que le recetaron creo que influyeron muy negativamente en su juego en la muleta. Y casi todos duros como el pedernal, hasta el punto que el 5º entró de vuelta a los corrales con la boca cerrada después de siete entradas al caballo (con dos puyazos, uno de ellos fortísimo; en el resto se escupió), una estocada honda atravesada, un pinchazo hondo y una media. En cualquier caso, y a pesar de la aparatosidad del encierro, me gustó más la novillada de abril de 2009

Y claro, cuando asoma la casta en el ruedo, los de luces se desconciertan, los carnés no se encuentran y hasta la dignidad torera se evapora. Los capotes y muletas estuvieron más tiempo en la arena que en la mano de los de a pie; algún novillero hubo que abandonaba precipitadamente el capote y salía de estampida al olivar; otro que huía despavorido con la muleta en la mano; banderilleros poniendo palos al rejoneo en el brazuelo o donde buenamente cayesen; en fin, que más de una vez me vino a la cabeza aquello de que "correr es de ladrones y malos toreros". Hubo una escena digna de ser fotografiada: en el último tercio del quinto novillo, su teórico matador estaba en el estribo por dentro del callejón, el toro en las rayas del tendido 1, dos peones en los medios y la muleta y el estoque en la arena.

No daré nombres ¿para qué? salvo una excepción a destacar: Domingo Navarro, un peón siempre presto a hacer el quite de sus compañeros, atento incluso cuando no le corresponde actuar y dispuesto a despejar el ruedo de cuantos impedimentos puedan entorpecer la lidia; sólo tuvo un fallo, pero me lo callo.

A la salida, saludé a Epifanio Rubio "Mozo" y contestó afirmativamente a mi pregunta sobre si en su época salián novillos como los saltillos de esta tarde, y añadió:
"Lo que ocurre es que los toreros de ahora no están acostumbrados a estos toros, porque no salen nunca ni les han enseñado cómo lidiarlos, y por eso no saben qué hacer con ellos. Ten en cuenta que lo mismo le pasaría a un conductor actual si le dieran un coche de gasógeno: no sabría ni arrancarlo".
Sabiduría de este veterano gran picador, que a sus casi 90 años sigue acudiendo impenitente a Las Ventas y a otras muchas plazas, verbigracia, la de la foto.





La foto de Mozo es de LUPIMON y corresponde a una corrida de toros en Cadalso el 14/09/2008.



Cuadro de puntuación de la novillada de José Joaquín Moreno Silva del 17/05/2010 en Las Ventas



(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)

lunes, 17 de mayo de 2010

El cartel de feria que aprobó el C.A.T. Las Ventas 16 de mayo de 2010

En mi primer comentario de la feria de San Isidrito 2010 elegí precisamente el cartel de toreros de hoy como ejemplo del incumplimiento del canon concesional. Decía así:
El incumplimiento del pliego concesional y de la oferta de la adjudicataria, por haber tardes en que no actúan, al menos, dos matadores del grupo 2 y otro del gusto de la afición de Madrid. Basta un ejemplo: Miércoles 12 de mayo [luego pasó al día 16]. Gabriel Picazo, Emilio de Justo e Israel Lancho. Este motivo es suficiente para que el CAT hubiese rechazado de plano los carteles de la feria.
Aclaro lo de los matadores del grupo 2. Como expuse en una entrada de 2009, el pliego indica que en la baremación se valorará especialmente la inclusión al menos de un matador de entre los 15 primeros del escalafón en plazas de 1ª (EP1ª) y de otro en plazas de 2ª (EP2ª), atendiendo para ello exclusivamente al números de festejos realizados. La oferta de Taurodelta alteró la naturaleza de los escalafones, pues al dato objetivo de número de festejos realizados añade otros indeterminados, como son: "tipos de plazas", "triunfos obtenidos" e "interés del aficionado de Madrid", haciendo una interpretación sui generis del pliego, al considerar que los 15 primeros del EP2ª son los que resulten después de excluir a los 15 primeros del EP1ª, que no es lo que dice el pliego. La oferta establece establece dos grupos, primero (G1º) y segundo (G2º), e incluye en el primero a los matadores jóvenes que confirmen su alternativa asimilándolos de esta forma a los 15 primeros del EP1ª. Y concretamente en la feria de San Isidros se compromete a programar:

- 6 corridas de toros con tres matadores del G1º
- 6 corridas de toros con dos matadores del G1º y uno del G2º.
- 2 corridas de toros con un matador del G1º y otro del G2º.
- 4 corridas de toros con dos matadores del G2º y uno del "gusto de la afición de Madrid".

Pues bien, confrontemos el cartel de hoy con la categoría más inferior: dos matadores del G2º y uno del gusto de la afición de Madrid. Incluso aceptando que el grupo 2º está integrado por los 15 matadores de toros que más actuaron en plazas de 2ª, ninguno de los tres estaría incluido en él, ya que de acuerdo con el propio programa oficial de la tarde de hoy:

- Gabriel Picazo actuó en 10 corridas en 2009.
- Emilio de Justo actuó en 5.
- Israel Lancho actuó en 3.

El Cuento de Arreglos Taurinos, saltándose a la torera el pliego y la oferta de Taurodelta aprobó por unanimidad este cartel. Es suficiente motivo para que todos los miembros del CAT hubieran sido cesados fulminantemente. Y el resultado de la tarde debió llevar a cualquier miembro del CAT a dimitir por vergüenza.

Porque hoy han salido toros llenos de eso que ahora se ha puesto tan de moda y que se llama toreabilidad, y los diestros han demostrado su absoluta incapacidad para aprovechar este derroche. No quiere ello decir que se tratase de toros bravos, ni mucho menos, ya que todos suspendieron en el primer tercio, además de su flojedad. Por cierto, que los dos remiendos de Pereda andaban más que escasos de trapío.

Picazo dispuso de dos toros de embestida pastueña, uno de Los Bayones, con el que oiría los tres avisos, y otro de J.L. Pereda. De Justo tuvo a su disposición un toro boyante de Los Bayones, que llevaba un cheque en blanco en el pitón izquierdo, embistiendo humillado y con codicia, y un descastado y sosísimo quinto del mismo hierro. Israel Lancho hubo de enfrentarse a un manso peligroso de J.L. Pereda y a un sexto potable de Los Bayones, que sin embargo no entendió.

En cuanto a subalternos, destacó la cara y la cruz de Lipi, horrible en la brega del 2º y destacado en sus dos pares al 5º, aguantando y clavando arriba.

Y esto fue así, porque así lo quiso el C.A.T.

ADDENDA: Se cumplió con el rito del recuerdo de la muerte de Joselito el Gallo en Talavera, 90 años después, y a Miguel Moreno su recuerdo le dejó "desmadejado", como cuenta en Tarde de emociones taurinas en el blog de Tony.

Cuadro de puntuación de la corrida de Los Bayones del 16/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

domingo, 16 de mayo de 2010

Mansigrande. Las Ventas 15 de mayo de 2010

PREVIO


Don Domingo Hernández es ese ganadero que salió contrariado de la feria de Fallas 2009 porque la corrida había salido encastada. El disgusto era explicable por la dificultad de comercialización de sus productos que podría derivar de continuar por esa línea.

Comparecía en su única actuación en la feria una primera figura como El Juli, para lo cual había elegido una ganadería a propósito, claro está. Cuentan que El Juli pidió torear una corrida La Quinta, y que la empresa se negó ¡A otro perro con ese hueso!

Le acompañaba, que no rivalizaba, Sebastian Castella, que también toreó esta misma ganadería en 2009, por cierto, con más éxito popular que toreo.

Completaba la terna un joven torero, Daniel Luque, que levantara muchas expectativas la pasada temporada, y que en ésta se halla sumergido en un bache considerable.

El papel, claro está, se agotó a las pocas horas de salir a la venta.

SÍNTESIS DE LA TARDE


Hasta aquí el planteamiento clásico del dicho "Corrida de expectación..."; y, como es habitual, el mismo se cumplió a rajatabla, por obra y gracia de 6 mansos 6. Y digo 6 y no 5 porque tampoco puede aprobarse al primero, como diré a continuación. Por si fuera poco, la presentación fue deplorable, por lo basto de sus hechuras.

El Juli habría resuelto con solvencia su compromiso, si no fuera porque no tuvo a bien colocar en suerte a los toros en el caballo (al primero le situó las dos veces en las rayas, y al segundo lo metió al relance) y tampoco mató como ha de exigirse a una figura. Tuvo la fortuna de enlotar al único toro apto para el lucimiento estético, el primero, "Listo", no de aprendizaje, sino preparado para que El Juli pudiese lancear cómodo y templado en el saludo, que remató toreramente con media desmayada. El animal no empujó en el peto y salió tan de naja que arrolló a Álvaro Montes en su salida. Noble y flojo en palos, fue aristócrata de derechas en la muleta, y algo protestón de izquierdas (pero poco, algo así como los sindicatos con la política gubernamental, para que el lector se haga una idea). Como alternó esos dos desiguales pitones, la faena fue de altibajos, con alguna serie redonda y otras enganchadas, sin faltar algún carrusel de por medio. Alargó sin mesura la faena y el toro quedó difícil de igualar. Dos pinchazos y un julipié caído pusieron mal broche a la faena.

Y no hubo más, porque el resto se esquematiza con cuatro pinceladas:

- El cuarto fue desconcertante en los dos primeros tercios (que se lo pregunten al Niño de Leganés), le atizaron de lo lindo en el primer puyazo, y acabó obediente y aborregado en la muleta suave y templada de un inteligente Julián López. Aquí hubo pinchazo hondo y estocada julipiense.

- Castella sigue en su línea de valor en la corta distancia y toreo menor en la media y larga. El corretón y huidizo segundo le permitió de salida lancear a pies juntos en los medios; fue flojo, rebrincado y manso en la muleta, mas peligroso por el izquierdo; terminó con sus demostraciones de valor pendular que entusiasman al personal; falló a espadas. El quinto se emplazó al principio, para continuar abanto; se repuchó en el caballo y levantó mucho la cara en el tercer par; lo demás, sin historia.

- Daniel Luque pechó con un tercero que anduvo pegando coces y cabezazos, y al que el sevillano no aplicó la receta obligada. Con el sexto, rajado de salida y de continuos arreones, sólo se lució el banderillero Jaime Padilla -curtido en mil batallas-; permitió algunos muletazos decorosos del Barbero de Sevilla cuando le dejaba pegada la muleta al hocico; lo que resultó de mal esgrima fue el sablazo sin soltar que le endilgó en los costillares.

Me preguntó un amigo por qué me muestro tan crítico con los carteles de San Isidro, incluso cuando incluyen figuras. Le contesté haciendo una similitud con la Ópera: qué dirían los aficionados al bel canto si en La Scala de Milán, se anuncia a Plácido Domingo con una orquesta sinfónica de segundo nivel y utilizando bastos instrumentos. Lo entendió.

Cuadro de puntuación de la corrida de Garcigrande - Domingo Hernández del 15/05/2010 en Las Ventas


(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela

sábado, 15 de mayo de 2010

Suspenso general. Las Ventas 14 de mayo de 2010

No reeditó Alcurrucén su buena actuación de junio de 2009 en esta plaza. Desigual presentación, sobresaliendo por abajo el anovillado y vareado 4º, luciendo además cuello de vaca vieja. Y desigual comportamiento y facultades. Muy flojos y descastados los tres primeros, el 1º hasta el punto de que tuvo el honor de obligar al usía a sacar el verde ínstantes después del blanco. El sobrero de El Torreón, tras romanear y derribar en el primer encuentro, acabó débil e insípido. Los tres restantes de los Lozanos, mansos pero con genio, que no con casta. Al 5º, que en varas no llegó a empujar en el peto porque se limitó a tratar de quitarse el palo y de cornear al estribo, el personal lo aplaudió al arrastre en una de esas extravagancias habituales que aquí se prodigan. Suspenso a todos y cada de los toros.

Poco podía hacerse con este material. En los tres primeros, el personal afeó a la terna que no supiera "cuidarlos". En los tres últimos, los actuantes no supieron aprovechar lo poquito que ofrecían.

Me da fatiga seguir escribiendo de Uceda Leal, que lleva camino de ser uno de esos toreros de obligada e injustificada presencia en los carteles de San Isidro. Esta tarde no sólo ha estado destoreando al 4º, fuera de sitio, con el brazo agarrotado y dando tirones hacia fuera, sino que además ha recetado una aplaudida estocada caída. Suspenso.

El Cid, un torero honesto que no sabe tapar sus defectos, se encontró con una parte de la plaza que jaleó en exceso unas anodinas verónicas de saludo al 2º, bien rematadas con la media en los medios, y con otra parte que le presionó cruelmente en el 5º cuando quedó en evidencia que sigue "desaparecido" ese artista que puso esta plaza boca abajo, y al que ni la prensa ni muchos espectadores han sido capaces de tragar. Además, ese juez de línea de tenis frustrado que tenemos en Las Ventas nos flageló, una vez más, con sus impertinentes gritos de "quenoooos". Suspenso (a El Cid; bueno, y al juez de línea también).

Miguel Tendero, no sólo no progresa, sino que va agudizando sus vicios de toreo despegado y descargado. Y como sigue sin entrar a matar, sino a topar, hora es de abandonar cualquier esperanza en su futuro como lidiador. Con la agravante de que necesitó de la ayuda de Rafael García para solventar el saludo al 6º que se frenaba y no pasaba. Suspenso.

Por lo demás, mal Agustín Collado que acabó siendo derribado por el 6º al no acertar a clavar la puya, a pesar de haber tenido tiempo y facilidades. También mal El Alcaraleño (¿le ha contagiado su jefe?)en banderillas, poniéndolas al rejoneo al 4º. A Antoñares lo arrolló el 4º, fracturándole el brazo izquierdo.

De la quema generalizada se salvó El Boni, suficiente con los palos, en particular en el tercer par al 2º que, habiendo quedado muy cerrado, ahorro capotazos citándolo, dejándole llegar y aguantando para dejar el par. Y magistral en la brega, fijando al toro sin capotearlo, y llevándolo templado y con el menor número de lances posibles, hasta el punto que El Cid, un tanto celoso, hubo de ordenarle que se lo dejara a él, tras salir el 5º del peto.

Del frío ya no les digo más, a ver si se aburre y se va.

Cuadro de puntuación de la corrida de Alcurrucén del 14/05/2010 en Las Ventas



(Cada aspecto está puntuado de 0 a 5, y la nota media es ponderada, al no tener todos los aspectos el mismo peso en la puntuación)


Nota: Publicado originalmente en el blog estrapicurciela
Comentarios a esta entrada

Me corto la coleta

Puede parecer pretencioso servirme de esta frase, reservada para los que del enfrentamiento con el toro han hecho su oficio, pero permítase...